

Fue el año 2001, el mismo año en que Kubrick dató su odisea espacial, cuando una película popularizaba una historieta de culto entre los lectores de cómics, Ghost World. Dirigida por Terry Zwigoff, quien ya había estrenado un documental dedicado a otro de los grandes del género, Robert Crumb, y producida entre otras por la productora de John Malkovich, la película logró una nominación a los Oscar al mejor guion adaptado (fue la primera película basada en una novela gráfica que recibió una nominación en esta categoría) y dos a los Globos de Oro para Thora Birch y Steve Buscemi. Y aunque quedaron a las puertas de estos premios, fueron muchos otros los que sí cayeron: un reconocimiento especial de los National Board of Rewiev a la excelencia cinematográfica, dos Independent Spirit, el prestigioso Pen Literary Awards… y unos cuántos más que por ser tantos sería tedioso enumerar…