Guy, retrato de un bebedor
¿Cómo se puede ser tan malo y tan tonto al mismo tiempo? ¿Se puede desafiar de tal modo a la Providencia, dejando un reguero de cadáveres y humillaciones con el único objeto de beber otro trago?
Tras El hombre que se dejó crecer la barba, Mi pequeño, Mowgli en el espejo, Arsène Schrauwen y Vidas paralelas, Olivier Schrauwen une sus fuerzas a las del dúo más inococlasta del cómic francés, Ruppert & Mulot, para rendir su peculiar tributo al género de la piratería y embarcar a su abyecto protagonista en un viaje fantasmagórico y letal. El océano, el alcohol y las voces de ultratumbra se erigen en verdaderos protagonistas de este clásico instantáneo en torno a un grotesco pirata y su desdichado aprendiz en un libro que, más que leerse, se escucha, como el eco del mar, los delirios de un borracho o una breve canción de tintes funestos.